En respuesta a la solicitud del presidente chileno Gabriel Boric, el gobierno de Argentina procedió a desmantelar los paneles solares erróneamente instalados en suelo chileno.
La operación se llevó a cabo en las primeras horas de la mañana, en un ambiente tenso pero que no obstaculizó la labor de los técnicos de la Armada Argentina.
Según un comunicado oficial, el panel removido era parte de un sistema de energía híbrido destinado a mejorar las instalaciones del Puesto de Vigilancia y Control de Tránsito Marítimo HITO 1, adyacente al puesto chileno Cabo Espíritu Santo.
El error de ubicación de uno de los paneles, situado tres metros dentro del territorio chileno, fue reconocido y corregido con la colaboración de la contratista encargada, asegurando su reubicación en Argentina.
La urgencia del procedimiento surgió tras las firmes declaraciones del presidente Boric, quien exigió la pronta corrección del error cometido durante la remodelación de la estación de vigilancia. El Ministerio de Defensa argentino confirmó la recepción de una disculpa formal de la Cancillería argentina por el incidente.
Un observador militar chileno supervisó las actividades realizadas por representantes argentinos en una zona fronteriza.
El gobierno de Javier Milei, buscando prevenir tensiones diplomáticas, coordinó una rápida respuesta entre la canciller Diana Mondino y el ministro de Defensa, Luis Petri, resultando en el envío de un equipo de técnicos y militares para desmantelar una instalación de paneles solares erróneamente ubicada en territorio chileno.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina admitió el error tras verificar datos georreferenciados suministrados por Chile, y confirmó que la construcción, donada por la Fundación Mirgor y Total Energies, no utilizó tecnología GPS, lo que llevó a la confusión.
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