Jueves de última chance y mucha tensión en Masterchef. Los participantes intuían que la prueba no sería fácil, pero jamás imaginaron tener que preparar hamburguesas originales e inventar aderezos para así conseguir subir al balcón que los salvaría de la eliminación. Y quien sorprendió, nuevamente, con su creación fue Juan Francisco pasando así a formar parte de los concursantes que pasan a la semana que viene.
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Pese a que el jurado criticó la hamburguesa que preparó Juan Francisco fue la mejor opción de todos los platos presentados. Gracias a sus hamburguesas de roast beef y entraña con salsa cumberland, el joven salvavidas se ganó un lugar en el balcón y lo festejó como si fuera la final del programa.
Lo más complejo de todo, y lo que terminó definiendo la prueba era el contenido de las hamburguesas, el que quedaba un poco a la deriva por los ingredientes que los cocineros encontraban en el mercado. De hecho, fue tal el caos que se produjo mientras seleccionaban las carnes que entre Candelaria y Rodolfo se cayó una de las bandejas que contenía el alimento y se derramó sangre sobre el piso y el zapato del especialista en realeza.
El jurado está cada noche más exigente. Los eufemismos quedaron de lado y ya no se guardan nada. Así fue que Donato de Santis, Germán Martitegui y Damián Betular terminaron haciendo llorar a Daniela con su comentario sobre las hamburguesas que la joven preparó.
Por otro lado, Agustín presentó una hamburguesa que según el trío que juzga los platos el reality de cocina más famoso del mundo "tenía gusto a pan dulce".