Golpe de calor: Los cuidados que hay que tener con los adultos mayores

Recién comienza el verano y las altas temperaturas ya se hacen sentir. La máxima pronosticada para este jueves es de 37 grados y ya se piensa en la pileta, en el ventilador o en alguna sombra para refugiarse. Incluso, son muchos los que deciden posponer compromisos hasta que baje el sol para cuidarse y prevenir un mal típico de esta época: golpe de calor.

Esta afección es definida por el Ministerio de Salud de la Nación como el aumento de la temperatura del cuerpo por una exposición prolongada al sol o por hacer ejercicios en ambientes calurosos o con poca ventilación, al punto de que el cuerpo pierde agua y sales esenciales para su buen funcionamiento.

El golpe de calor suele afectar en mayor medida a los niños y a los adultos mayores. En este sentido, estuvo el médico gerontólogo, Félix Nallim, en Viva la Mañana brindando recomendaciones a tener en cuenta para cuidar a los ancianos.

El especialista destacó que es fundamental la hidratación, sucede que los adultos mayores tienen “trastornos en la ingesta de líquidos, tienen una sensación de saciedad y toman menos cantidad de agua”. Por lo que resulta fundamental estar atentos e invitarlos o bien “obligarlos” a beber entre un litro y medio o 2 de agua durante el día.  

El golpe de calor sucede cuando el cuerpo de la persona supera los 40 grados, detalló Nallim, y es necesario acudir con urgencia a un médico porque puede llevar a la muerte.

Con respecto a los síntomas, el especialista explicó que esta afectación se manifiesta con estado de fatiga, pesadez en la cabeza, vómitos o nauseas. Además, detalló que en un primer momento hay un aumento de la traspiración, pero que luego la persona se enrojece y al estar deshidratada, no traspira.

Nallim destacó que hay que tener en cuenta la medicación que toma la persona y las enfermedades de base que padezca para el tratamiento de la afectación. En cualquier caso, se recomienda acudir a un especialista. Sin embargo, hasta tanto llegue la atención médica, y el anciano esté consiente, hay que darle agua de a sorbos, desvestirlo, se lo puede colocar en una ducha con agua fría o bien ponerle paños de agua fría en la zona inguinal, las axilas, pecho o frente.

Para prevenirlo es importante:

• Llevar siempre una botella con agua.
• Aun cuando no sienta sed, tomar la mayor cantidad de líquidos posible, sobre todo agua mineral y jugos de fruta fresca.
• Evitar salidas y actividades físicas en las horas de calor (entre las 11 y las 16).

• Procurar estar a la sombra. Usar sombreros o pañuelos y ropa liviana y amplia, de colores claros.
• No consumir bebidas alcohólicas, porque alteran la capacidad de respuesta al calor y favorecen la deshidratación.
• Evitar las bebidas con cafeína (café, té, bebidas cola) o muy azucaradas.