José Luis Arregui decidió rifar su camioneta para solventar el tratamiento de su esposa que padece cáncer. La mujer necesitaba ser operada de un tumor y no contaban con el dinero para la cirugía. La sorpresa se la llevó cuando el ganador no aceptó el premio.
Este conmovedor suceso tuvo lugar en la localidad de Marcos Juárez, en Córdoba. Arregui logró juntar la plata para la cirugía de su mujer, al rifar su camioneta modelo 69′. Sin embargo, cuando el hombre que se llevó el número ganador se enteró del momento que estaba atravesando esta familia decidió devolver el rodado.
"No voy a querer el premio. Te lo dejo. Es tu herramienta de trabajo y te sirve para el tratamiento de tu señora", le dijo al organizador de la rifa, Carlos Boaesso, el ganador. Después de ese diálogo, ambos se estrecharon en un emotivo abrazo.
La mujer de Arregui fue operada y la intervención fue satisfactoria. "Ya le sacaron el cáncer y ahora está evolucionando bien. Empezó a caminar. Pienso que muy pronto le van a dar el alta", aseguró en diálogo con una radio de la provincia de Córdoba. Pese a que la operación fue un éxito, José Luis sigue tratando de juntar plata porque con lo que pudieron recaudar están "al límite". Su mujer está internada en una clínica privada que tiene un costo elevado para su economía.
"Quería que el sorteo fuera transparente. Tenía que venderlo en una semana porque tenían que operar a mi mujer. Hice mil números. Le dimos a la señora del frente que tiene negocio. Carlos fue el primero que lo había encargado. A los dos sábados siguientes, lo sorteamos por Lotería Nacional. El número tenía que salir entre los 10 y salió el que había comprado este señor de Leones", explicó Arregui sobre la forma en la que decidió organizar la rifa.
Por su parte, Carlos le contó su versión a la misma radio cordobesa: "Yo lo compré en un negocio que visito todas las semanas.Él vive al frente. Le pedí el 19 y compré el 619. Lo hice para colaborar. Y el martes fui. La dueña lo llamó a José Luis, pero le dije que no iba a recibir la camioneta", explicó, al tiempo que aseguró que en el momento que se encontró con Arregio "nos abrazamos, lloramos nosotros, la dueña y los clientes".
"Fue una emoción bárbara, no tengo palabras de agradecimiento con este muchacho. Era la única solución que tenía para solventar los gastos de mi señora. Fui hasta Bell Ville para sacar un crédito, pero me lo negaron. No hay explicación por todo lo que hizo. Ya nos vamos a juntar con Carlos, él no la conoce", fueron las últimas palabras de Arregui luego de cumplir con su objetivo.