Este mujer, se define a si misma como una "adicta a la cirugía" pero como todas las adicciones, puede terminar muy mal. Su adicción la llevó a operarse los gluteos y esa decisión podría traerle más de un dolor de cabeza.
Stacy Marie Delgiudice, es conocida en el Reino Unido como "Star Delgiuidice" y contó su experiencia en el programa This Morning de la cadena británica Channel 5.
La mujer la está pasando tan mal que durante la entrevista tuvo que estar de pie, debido a que los nuevos implantes le causan dolor cada vez que se sienta, incluso cuando conduce.
"Es una nueva tendencia muy peligrosa. No me había dado cuenta de los peligros y los riesgos", comentó Delguidice y agregó: "realmente no me di cuenta de lo que iba a hacer y me causó gran ansiedad", reveló la mujer.
Pero lo más impactante fue cuando la mujer confesó que tiene miedo de que sus nuevos implantes "exploten".
Con el fin de obtenerlos, la mujer tuvo que engordar unos 19 kilos para acumular grasa, que luego fue implantada en sus labios y glúteos. La operación duró unas 7 horas y costó más de 20.000 dólares (cerca de $400.000).
Ahora a la mujer le esperan dos largos años de recuperación, durante los cuales el dolor reducirá, según le aseguraron los médicos. Sin embargo, Delgiuidice confiesa echar de menos su aspecto anterior a la operación: "Nunca he sido feliz con la forma en que me veía. Solía ser talla cero, realmente delgada, y mi trasero era muy plano. Pero realmente lo extraño".
Delguidice desembolsó unos 277.000 dólares para modificar su aspecto con cirugías. Aparte de los glúteos, la mujer tiene operada la nariz y lleva implantes en las mejillas, los labios y los pechos.
En nuestro país, los ejemplos de Silvina Luna, Virginia Gallardo y Pamela Sosa demostraron las dificultades que representa para la salud la operación de glúteos.
En ese sentido, los científicos advirtieron sobre el riesgo de los implantes de glúteos, que pueden incluso causar dolencias crónicas.
Un estudio de hace varios años demostró que de los 2.226 participantes que se hicieron implantes, 848 ―el 38 %― reportaron complicaciones tras la operación. El 7,9 % de los pacientes se quejó de una hernia incisional, que ocurre cuando "las personas se inclinan y la incisión puede separarse", comentó un coautor del estudio.
Por su parte, el 5 % necesitó la revisión del implante y más del 4 % experimentó dolores a lo largo de más de 12 semanas.
Otros 4 % desarrolló seromas, lo que significa que el líquido se acumuló debajo de la piel. Asimismo, en el 3,8 % de los casos se necesitó la extracción de los implantes a causa de dolor y por seromas crónicos, según el estudio.
Los cirujanos plásticos tampoco se muestran entusiasmados con la operación. "Simplemente, anatómicamente nos sentamos todo el tiempo sobre la zona donde van los implantes", comentó el especialista Alexes Hazen a Women's Health y destacó: "Es difícil imaginar que sería cómodo".