Un estudio realizado en Mendoza demuestra que los pequeños que nacen y viven en familias con subsidios de bienestar social aprenden menos de la mitad que aquellos que nacen en familias de profesionales.
Un estudio realizado en Mendoza muestra que los niños con menor calidad de vida y con menores oportunidades socioeconómicos tienen un desarrollo del lenguaje y de la lectura muy inferior a quienes nacen en familias de padres profesionales.
El investigador del Conicet, Angel Tabullo, estudia la neurobiología del lenguaje en las escuelas de Mendoza, y según consigna, su investigación se denomina “Procesamiento del lenguaje en niños escolarizados provenientes de diferentes sectores socioeconómicos: un estudio de potenciales cerebrales”.
“El desarrollo de la lectura en los niños, y el desarrollo del lenguaje en general está determinado por variables socioambientales, pero la variable más fuerte es la interacción verbal con los padres y la relación que tienen sus padres con la lectura en sus vidas y el hogar” asegura Tabullo.
Además, este estudio se basa en otra investigación que analizó qué pasa con el vocabulario en el niño hasta los 3 años y cómo influye el factor socioeconómico.
Aquellos niños que nacieron en familias profesionales aprenden hasta 1116 palabras; aquellos que nacen en familias de clase trabajadores aprenden 749 palabras, mientras que aquellos pequeños que nacen en familias que reciben algún subsidio de bienestar social sólo aprenden 525 palabras a los 3 años, menos de la mitad que sus pares de clase media/media alta.