Los ex empleados del municipio se reunieron en las afueras del edificio para manifestarse en contra de la medida. Según explicaron las autoridades, esto se debe a que decidieron no renovar contratos, ya que las cuentas de la municipalidad estarían en rojo.
Largas filas se vieron en la mañana de este 2 de enero en la entrada a la Municipalidad de Las Heras. Es que cientos de empleados del mencionado municipio se agolparon para pasar su huella con el objetivo de saber si seguían trabajando en el lugar. El intendente, Francisco Lo Presti, decidió no renovarle el contrato a cerca de 600 empleados municipales que vencía el pasado 31 de diciembre y que en su mayoría habían sido incorporados en el año 2023.
La medida se hizo efectiva este martes, cuando la gran mayoría de los ex trabajadores llegó a las dependencias municipales donde se desempeñaban y se encontraron con que su contrato de trabajo, que vencía el 31 de diciembre, no fue renovado por el intendente de Las Heras. De hecho, en el sistema de registro de huella digital ya no aparecían, y, por otro lado, tampoco los dejaron firmar su asistencia. “Fuimos a marcar y nos estábamos”, relato una de las ex empleadas del sector de Obras Públicas.
Esto desencadenó varias protestas enfrente del municipio, donde algunos trabajadores decidieron cortar la calle y hasta quemaron basura contra de la medida. Sin embargo, desde la comuna explicaron que ninguna persona fue despedida y que la renovación de los contratos de trabajo no se encontraban en el presupuesto pactado para el 2024.
“No se le renovó el contrato a estos 600 empleados que, en su mayoría, habían ingresado en el último año de la gestión anterior. Esto era algo que ya se sabía, incluso ya no se habían considerado en el presupuesto municipal”, aseguró el secretario de Finanzas de Las Heras, Alejandro Gallego. Además, agregó que se trataban de empleados que habían entrado en el 2023 bajo la gestión de Daniel Orozco.
Según explicaron las autoridades municipales, una de las áreas más afectadas por la medida fue la Secretaria de Obra Pública y de Gobierno. Gallego explicó además que desde la comuna consideran que “no se verán afectados los servicios ni en su realización ni en la calidad de la misma”. Y aclaró: “No renovamos los contratos porque entendemos que no es necesario para la mejor prestación de los servicios”. A esto, agregó, “solo hemos dejado el número de personal que consideramos necesarios”, ya que la situación del municipio es compleja, puesto que se encuentran frenadas la mayoría de las obras públicas por falta de dinero.