En un mundo donde las relaciones de pareja son cada vez más efímeras y triviales, pensar en un amor para toda la vida se presenta como todo un desafío. Sin embargo, la historia de Fita y Francisco "Quitito" Calderón es un testimonio de que el amor verdadero puede durar toda la vida. Esta pareja mendocina, que lleva más de seis décadas de casados, demuestra que, a pesar del paso del tiempo, los sentimientos siguen tan fuertes como el primer día.
Se conocieron hace 67 años en un baile y después de miradas cruzadas supieron que estarían juntos toda la vida. "Fue en un baile, la vi y fue un golpe porrazo. Nunca más me separé de ella", recuerda Quitito con una sonrisa. Para él, ese momento fue decisivo. Desde el primer instante, supo que Fita sería su compañera para toda la vida.
Fita, por su parte, cuenta: "Me habían hablado de él, sabía su nombre y apellido. Y un día, lo vi pasar delante del micro y lo reconocí. Ahí supe que era el Quitito Calderón". Poco tiempo después, volvieron a encontrarse en ese famoso baile donde él la sacó a bailar y no se separaron nunca más. "Desde ahí, estamos unidos", dice Fita con ternura.
Al ser consultados sobre el secreto de su larga relación, la respuesta de ambos es clara: respeto, admiración y compañerismo. Para Quitito, estas son las bases que han sostenido su amor a lo largo de tantos años. "Yo creo que siempre el respeto es parte fundamental para todas las cosas en la vida, y para el amor también", afirma. Y Fita agrega: "Es muy bueno, muy compañero. Lo quiero mucho hoy como el día que lo conocí".
Fita deseó que todas las mujeres tengan un marido como Quiquito porque es "muy bueno y compañero". "Pero este es mío", dice con humor. Ambos coincidieron en que quisieran "irse" juntos porque para cualquiera de los dos sería muy doloroso quedarse en esta vida sin el otro.
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