Ejemplares de larga data sin registrar y hasta una mariposa en un libro del siglo 18 fueron encontrados en el marco de un trabajo de conservación que se está efectuando en la biblioteca pública General San Martín
Luego de 20 años se está realizando un trabajo de conservación e inventario de lo que se denominan “joyas bibliográficas” (libros antiguos y de carácter raro).
Se trata de una iniciativa que se realizó allá por el año 1993, pero que por falta de presupuesto dejó de realizarse en 1998.
El objetivo es controlar el estado de libros que datan del año 1600 en adelante, además de preservarlos y tener un registro de los mismos; ya que se trata del legado de nuestros próceres y de destacadas personalidades.
La biblioteca pública San Martín fue creada en 1822 con textos donados por el Libertador, Tomás Godoy cruz, Juan Lafinur y Nicolás Avellaneda.
Ahora, a partir de una iniciativa conjunta de la secretaria de Cultura con las autoridades de la biblioteca, desde hace un mes, un equipo de 5 personas está encarando esta tarea y ya han encontrado 6 libros antiguos que no estaban registrados y hasta una mariposa en el interior de un ejemplar del siglo 18.
En diálogo con Noticiero 9, Cristina Moretti, la bióloga que al igual que hace 20 años atrás está realizando esta tarea, señaló que significa para ella la tarea.