El expresidente Alberto Fernández presentó a una nueva testigo en la causa que lo investiga por violencia de género tras una denuncia de su expareja, Fabiola Yáñez. La testigo afirmó que Yañez presentaba “comportamientos desequilibrados”, enfrentaba problemas relacionados con el consumo excesivo de alcohol y sufría caídas en estado de ebriedad.
La mujer, llamada "Testigo B" no solo dijo que Yáñez podría haberse lastimado a ella misma en estado de ebriedad, sino que era infiel. A esta información accedió diario La Nación.
La testigo B sostuvo que la ex primera dama mantenía relaciones extramatrimoniales durante su tiempo en la quinta de Olivos, y también en sus viajes a Misiones y en el departamento de Puerto Madero.
Este testimonio, que se suma a otros cuatro presentados por Fernández en el expediente, fue entregado fuera del ámbito judicial y aún no ha sido incorporado oficialmente a la causa que investiga el juez Julián Ercolini, bajo la supervisión del fiscal Ramiro González. Sin embargo, el medio citado accedió al contenido del acta notarial donde constan las declaraciones.
Entre los detalles más relevantes del testimonio, la “testigo B” señaló que Yañez solía consumir grandes cantidades de alcohol, especialmente champagne. “La mayor cantidad de consumo era de champagne, todas nosotras le llevábamos alcohol a pedido de ella (...) Alberto no la dejaba tomar e intentaba ayudarla en su adicción, pero era imposible”, añadió.
El testimonio también refuerza la versión de la defensa de Fernández, que argumenta que los moretones visibles en imágenes de Yañez podrían haber sido causados por caídas accidentales, y no por agresiones físicas. “Ella perdía la noción de tiempo y espacio, y se quedaba despierta hasta el otro día", describió la testigo, quien además recordó un episodio en el que Yañez se cayó estando en estado de ebriedad: “Un día borracha se cayó en la ligustrina cuando estábamos en el quincho”.
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