Marine Le Pen fue la controversial competidora de Emmanuel Macron en las elecciones presidenciales de Francia.
Le Pen es la cara del Frente Nacional e hija del fundador del partido, Jean-Marie Le Pen, quien había expresado que fue un detalle el gas con el que se mató a los judíos durante la segunda guerra mundial. Durante su campaña, si bien se despegó de los dichos de su padre, encaró la campaña con ideas separatistas, discriminadoras y xenófogas.
Algunas de sus propuestas eran: