Los rugbiers franceses acusados de abuso sexual en Mendoza, Hugo Araudou y Oscar Jegou, ya están en su país natal luego de que quedara firme la resolución judicial que lo autorizó a salir de la Argentina la semana pasada. Los abogados de la denunciante no se opusieron a la medida dictada por el fiscal adjunto en lo Penal, Gonzalo Nazar, lo que permitió que la decisión se mantuviera sin cambios. Sin embargo, la próxima semana se conocerían las pericias psicológicas y psiquiátricas realizadas a la presunta víctima y esto dar un giro en la causa.
La denunciante dio una entrevista a Noticiero 9 (que fue transmitida por Telefe Noticias) y relató su versión de los hechos. Lo hizo bajo el nombre ficticio de María para preservar su identidad y la de sus dos hijos, menores de edad. La mujer de 39 años contó que está haciendo diferentes tratamientos médicos para poder sobrellevar la situación.
María fue a bailar a Wabi (en el Acceso Sur y Lateral Este) y de casualidad conoció a Hugo (morocho). La mujer dijo que él la invitó a tomar bebidas alcohólicas a la habitación del hotel y ella accedió. "Cuando ingresé a la habitación y vi que no hay bebidas le pedí por favor que me deje ir y él me dijo que no".
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"Hugo me tenía sostenida de la garganta, me hizo tanta presión que me quedé sin oxígeno. Alcancé a darle una cachetada y se enfureció más", dijo y contó que en ese momento ingresó a la habitación Oscar (el rubio) "y en vez de solidarizarse conmigo se desvistió".
"Me golpearon tanto y me ahorcaron, quedé rendida. Ya no pude salir más de la habitación porque fue tal la golpiza que me dieron que no tuve tiempo ni de pensar. Era imposible escapar con dos bestias que miden casi dos metros", relató.
Y dio su versión del calvario que vivió: "Hugo me agarró de los pelos y me tiró al piso arrastrándome dos metros, golpeándome las rodillas y las piernas, me subió a la cama de Oscar, en la cual me obligó a practicarle sexo oral mientras el otro se tocaba"
"Me pegaban cachetadas de los dos lados, no sé quién de los dos me pegó una trompada en los ojos. Pude salir cuando se quedaron dormidos", agregó.
"Es muy difícil contarlo, no tengo intenciones de revictimizarme, sino de salir adelante de esto", dijo la muer que denunció a los rugbiers franceses.
Desde el Ministerio Público informaron que, con esta resolución firme, los deportistas “podrán salir de Argentina de inmediato”. La decisión de Nazar estaba sujeta a una audiencia que se llevó a el martes de la semana pasada ante la jueza de Garantías, Eleonora Arenas, en la que se confirmó que la salida del país de los acusados no sería objeto de debate.
Durante la audiencia en el Polo Judicial Penal, la jueza abordó el pedido de la querella para ampliar la pericia psicológica que ya se había realizado a los dos rugbiers imputados.
La jueza de Garantías, Eleonora Arenas, 1 “rechazó el pedido de la querella de ampliar la pericia psicológica de los co-imputados de la causa, debido a que la querella no justificó por qué las pericias en cuestión resultan estar incompletas”. Según apuntó, las pericias fueron realizadas acorde al art. 253 y 255 del Código Procesal Penal de Mendoza.
"Para la doctora Arenas está terminado el proceso pericial como esta, sin haber podido aplicarse las técnicas a las que si sometió nuestra representada", señaló la abogada de la denunciante, Natacha Romano.
Sin embargo, siguen imputados por "abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos personas", un delito que arriesga entre 8 a 20 años de cárcel.
A principio de julio, los jugadores fueron detenidos en Buenos Aires cuando se disponían a regresar a su país. Fue luego de que la presunta víctima fuera a la justicia y denunciara que la violaron en un hotel del centro de Mendoza tras el partido de rugby entre la delegación francesa y Los Pumas.
Los eventos que llevaron a las acusaciones habrían sucedido tras una celebración en un conocido boliche local, donde los rugbiers se encontraron con la presunta víctima.
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