El reciente paquete fiscal presentado en la Ley Bases introduce cambios significativos en el Monotributo, afectando a más de dos millones de trabajadores autónomos.
En estecaso, aunque las cuotas mensuales aumentarán, también lo harán los límites de ingresos permitidos, lo que resulta en un trayecto extendido hacia el Régimen General.
El Congreso ratificó ajustes que incrementan los topes de ingresos y cuotas en un rango del 300% al 330%. Ahora, el ingreso máximo anual se establece en $68 millones, eliminando la distinción previa entre tipos de actividades económicas para la categorización simplificada.
Las escalas de ingresos y los pagos correspondientes también experimentan un alza; por ejemplo, los contribuyentes de la categoría "A" podrán facturar hasta $6,45 millones al año.
En el extremo superior, los de la categoría "K" verán su límite aumentado a $68 millones. Además, se ajustarán al alza los pagos mensuales destinados al impuesto integrado, así como las contribuciones al sistema de jubilación y la cobertura de salud.
Las cuotas mensuales variarán desde $26.600 para la categoría "A" hasta $280.734 para la categoría "H", marcando un significativo incremento desde los montos actuales que oscilan entre $12.128 y $66.111.
Se establece un nuevo valor unitario de facturación de $385.000, aplicable tanto a servicios como a ventas de productos, con ajustes anuales según la inflación.
Adicionalmente, se ofrece una oportunidad única para que aquellos que hayan migrado al régimen general por superar los topes previos puedan retornar al Monotributo, sin la espera de tres años, siempre que se ajusten a los nuevos criterios.
El artículo 104° especifica que los excluidos automáticamente, ya sea por decisión propia o administrativa, podrán reingresar al sistema simplificado.
Con el Monotributo Social seguirá activo con un tope de facturación de $6.450.000. Además, la cuota se irá a $9900.
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