A la hora de imponderables, accidentes, rupturas, o traumas, suponemos que actuar de determinada manera puede ayudar a la persona. Sin embargo, si no se manejan ciertas premisas puede resultar todo lo contrario.
Los Primeros Auxilios Psicológicos (PAP) tienen por objetivo brindar alivio emocional inmediato, vincular a los afectados con los dispositivos de ayuda necesarios y prevenir el desarrollo de complicaciones de largo plazo. Si bien en la teoría la definición suena perfecta, en la práctica… ¿Sabemos contener o ayudar a otros en momentos traumáticos, inesperados o difíciles? En general lamentablemente no. Por ello, la neuropsicóloga Cecilia Ortiz argumenta que “es fundamental que todos sepamos qué hacer en una situación en la que alguien colapse psicológicamente, por diversos motivos en donde la primera sensación es de desorganización y desborde, ya sea por un ataque de ira, de pánico, crisis conductual o shock”.
– ¿Cómo ayudar a quien le sucede de forma efectiva?
Si no se conoce a la persona, por ejemplo, a la cual le da un ataque de pánico en plena calle, lo primero que uno debe hacer es presentarse, es decir, contarle a la persona que está mal cuál es mi nombre. Cuando uno le tiene que hablar a una persona que está en una crisis psicológica, el primer punto es poder hacer contacto visual. Nunca le hables a una persona que está en crisis psicológica desde atrás, ni intentes sostenerla, tomarla o agarrarla. Lo importante es mirarla a los ojos, presentarse, mirarla y hablarle de forma pausada. Se trata de una primera etapa en donde se empatiza con el otro.
– ¿La escucha en este sentido es importante?
Total, y absolutamente. No intentemos hablarle, sino escuchar. En las crisis psicológicas es fundamental que se pueda poner en palabras qué es lo que le está pasando a la persona. Cuando deseamos ayudar a la persona hay que entender que no es un diálogo, sino un momento de escucha para con el otro.
– ¿Y si la persona está en shock y no puede hablar?
– Me quedo al lado, tratando de que se sienta contenida. Las patologías psiquiátricas se han incrementado, y poder estar listos para ayudar con los denominados Primeros auxilios psicológicos (PAP) resulta de vital importancia.
Para tener en cuenta
Algunos de los ejes de los Pap se refieren a la capacidad de escucha activa, priorizando la expresión y catarsis de la persona afectada por sobre las directrices o discurso del quien apoya, promoviendo un ambiente de acogida y evitando el cuestionamiento. Entre las técnicas comunicativas relacionadas a este eje se encuentran el refuerzo constante al recibo de información, el parafraseo y la atención focalizada permanente.
Otros ejes se refieren a la relevancia de regular la respiración como forma de recuperar mayor control ante el desasosiego físico provocado por la ansiedad, establecer una categorización de necesidades donde se priorice lo más urgente o que podría provocar un cambio en la realidad que vivencia la víctima, así como la coordinación con redes de apoyo disponible que entreguen ayuda concreta inmediata, o en última instancia recurrir a la psicoeducación a fin de facilitar una mayor comprensión de lo que está pasando cuando se haya logrado controlar en parte las sensaciones desadaptativas más agudas.
La profesional estuvo con el equipo de Cada Día. Mirá la nota: