Tener una huerta casera no solo es una excelente manera de asegurarte de consumir alimentos frescos y orgánicos, sino que también es una actividad relajante y gratificante.
La idea de cultivar tus propias verduras y hierbas aromáticas puede parecer intimidante al principio, pero con un poco de planificación y cuidado, cualquier persona puede hacerlo.
Agosto es un mes ideal para iniciar tu huerta, ya que muchas plantas prosperan en esta época del año.
La espinaca es una de las verduras más fáciles de cultivar en tu huerta casera.
Agosto es un mes perfecto para sembrarla, ya que prefiere temperaturas frescas.
Plantá las semillas en un suelo bien drenado y rico en materia orgánica.
Mantené el suelo húmedo, pero no empapado, y en unas semanas empezarás a ver las primeras hojas.
La lechuga es otra opción excelente para sembrar en agosto.
Podés optar por variedades como la lechuga romana, la lechuga crespa o la lechuga mantecosa.
Al igual que la espinaca, la lechuga prefiere temperaturas frescas y un suelo bien drenado.
Sembrá las semillas directamente en la tierra y asegurate de regarlas regularmente para mantener el suelo húmedo.
Las zanahorias también pueden sembrarse en agosto.
Necesitan un suelo suelto y bien drenado para crecer correctamente.
Sembrá las semillas directamente en la tierra y mantené una humedad constante en el suelo.
Recordá que las zanahorias pueden tardar varias semanas en germinar, así que tené paciencia.
La acelga es resistente y fácil de cultivar.
Agosto es un buen momento para sembrarla, ya que tolera tanto el calor como el frío.
Sembrá las semillas en un suelo bien drenado y asegurate de mantenerlo húmedo. Podrás cosechar las hojas tiernas en unas pocas semanas.
El perejil es una hierba aromática muy versátil en la cocina y también es fácil de cultivar.
Podés sembrar sus semillas en agosto, en un lugar con buena exposición al sol y un suelo bien drenado.
Asegurate de regar regularmente y en unas semanas tendrás perejil fresco para tus recetas.
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