Una mujer fingió el secuestro de su hijo con el único objetivo de obtener $150.000 de su ex marido, en una puesta en escena que involucró a la madre y a una amiga de la mujer.
La Fiscalía Federal de San Rafael determinó que el 8 de junio pasado la madre del niño simuló el secuestro para extorsionar al padre, de quien se encuentra separada. La Fiscalía pidió la declinatoria de competencia para que el fuero ordinario de Mendoza investigue la posible comisión del delito de extorsión en grado de tentativa.
El fiscal interinamente a cargo de la Fiscalía Federal de San Rafael, Federico Baquioni, solicitó la declinatoria de competencia en favor de la Justicia de la provincia de Mendoza de la investigación por el supuesto secuestro extorsivo de un niño de ocho años, tras constatar que el pequeño nunca estuvo cautivo, sino que su madre habría simulado el hecho para obtener dinero por parte del padre, de quien se encuentra separada.
El 8 de junio la abuela materna del chico, quien fue avisada por su hija, llamó al padre y le dijo que una mujer había entrado a la casa mientras el niño estaba solo y que se lo había llevado, y para volver a verlo debía entregar $150 mil a las 18.00 en el cementerio de la ciudad.
Ante la posibilidad del secuestro extorsivo, el fiscal Baquioni encomendó una serie de tareas a la Unidad Investigativa San Rafael y a la Unidad de Escuchas Telefónicas y Antisecuestros de la Policía de la Provincia de Mendoza, a la Delegación “San Rafael” de la Policía Federal Argentina, a la Gendarmería Nacional y a la Dirección de Asistencia Judicial, Delitos Complejos y Crimen Organizado de la Nación.
Cerca de las 19.00 el niño apareció en la casa de un compañero de la escuela, a donde lo había llevado una mujer, amiga de su madre, para que luego asistiera con su amigo a la clase de Taekwondo.
Según informa la fiscalía, se pudo determinar que la madre hizo faltar al niño a la escuela y lo dejó al cuidado de una mujer. Con el pequeño fuera de vista, fue a un locutorio y efectuó el llamado extorsivo a su propio celular.
En base a las pruebas colectadas en la pesquisa, se pudo determinar que aquel día la madre del chico lo hizo faltar a la escuela y lo dejó al cuidado de aquella mujer. Con el niño fuera de vista, fue a un locutorio y efectuó el llamado extorsivo a su propio celular, del cual hizo saber luego a su ex pareja, quien podía juntar el dinero entre su grupo familiar.
Ante la insistencia de la mujer, respecto a la entrega del dinero, el padre del chico comenzó a sospechar. Así se pudo establecer que el pequeño no había estado secuestrado y que todo era un ardid de la mujer para obtener dinero.
En virtud de ello, el fiscal Baquioni consideró que debía declinarse competencia en favor de la Justicia de la provincia de Mendoza, para que investigue si la madre del chico habría incurrido en el delito de extorsión en grado de tentativa, en perjuicio de su ex pareja. Además, el representante del Ministerio Público Fiscal consideró apropiado dar intervención al Juzgado de Familia o al Órgano Administrativo de Protección de Derechos, ante la posible vulneración de los derechos del niño.