Argentina logró su primera medalla dorada en los Juegos Olímpicos de París 2024. Fue José Torres quien con una impecable rutina de BMX Freestyle se coronó con un puntaje de 94,82.
La excelente primera ronda de Maligno Torres 🇦🇷 en la final del ciclismo BMX freestyle 🚲 de los #JuegosOlímpicos.pic.twitter.com/UwVhBpsTuB
— VarskySports (@VarskySports) July 31, 2024
El argentino logró la medalla en su primer intento. En el cual casi no tuvo errores y el jurado lo juzgó con un puntaje de 94,82. Luego en la segunda pasada tuvo una puntuación similar, llegando a 92.
Los competidores fueron el inglés Kieran Reilly y el francés Anthony Jeanjean, quienes estuvieron cerca pero no pudieron con el poderío del argentino quien brilló y conquistó a los jurados.
La clasificación final quedó de la siguiente manera:
AJAJAJAJAJA EL ARGENTINO TORRES GIL ACABA DE GANAR EL ORO EN BMX EN LOS JUEGOS TROLIMPICOS Y DEJO EN SEGUNDO Y TERCER LUGAR A UN INGLES Y A UN FRANCES...
— Piti (@elpittttt) July 31, 2024
MOMENTO TOTALMENTE PATRIOTA🚬🚬 pic.twitter.com/dunTN3p5Rh
José Torres Gil nació en en Santa Cruz de la Sierra. Junto a su hermano gemelo Francisco Torres Gil, emigró con su familia a Argentina cuando tenían 11 años, estableciéndose en la provincia de Córdoba. Allí, José descubrió su amor por los deportes extremos y el ciclismo.
El fútbol fue el primer deporte que los hermanos practicaron en su nueva ciudad, lo que les permitió hacer amistades. No obstante, a los 14 años, un encuentro fortuito con un ciclista BMX realizando impresionantes acrobacias cambió el curso de la vida de José. Fascinados por el espectáculo de un flair, un giro de 180 grados en el aire, los hermanos se sintieron impulsados a explorar el mundo del BMX freestyle.
Este nuevo interés pronto se convirtió en una dedicación seria, y los hermanos empezaron a entrenar intensamente, aprendiendo y perfeccionando trucos y piruetas. A pesar de las dificultades iniciales, como tener que compartir una sola bicicleta y enfrentar constantes reparaciones, su pasión y determinación nunca flaquearon.
José y Francisco se lanzaron al circuito competitivo del BMX freestyle entre los 16 y 22 años. Desafortunadamente, la carrera deportiva de Francisco se vio truncada por una lesión de espalda, resultado de múltiples caídas y una condición preexistente de escoliosis, lo que le obligó a retirarse prematuramente del deporte que tanto amaba.
José siguió y se hizo conocido en el mundo del deporte por su tenacidad, logró destacarse a pesar de los obstáculos. Su ascenso comenzó en 2017, cuando se coronó campeón en el Nass Pro Park Championship, emergiendo como una estrella en el BMX freestyle. En 2019, su talento le valió una medalla de plata en los Juegos Panamericanos celebrados en Lima.
El 2023 se reveló como un año decisivo para Torres Gil, marcando su nombre en la historia del deporte argentino. En julio, se alzó con el oro en los X Games, convirtiéndose en el primer argentino en triunfar en la competencia de Park de BMX freestyle en California. Su victoria en los Juegos Panamericanos de Santiago, meses más tarde, no solo fue un logro más en su carrera, sino que también le aseguró un lugar en los próximos Juegos Olímpicos de París 2024, tras una intensa espera y clasificación en el duodécimo puesto de las Series de Clasificación Olímpica, beneficiándose de la redistribución de plazas por parte de la UCI.
En una conversación con Biciclub, José reflexionó sobre la influencia de sus primeros años en su desarrollo personal y profesional. "Los comienzos son siempre los más complicados, pero es en la pasión donde encontramos la fuerza para superar los desafíos", comentó. Además, destacó el valor del soporte familiar y comunitario en su trayectoria. A pesar de las limitaciones económicas que impedían adquirir dos bicicletas, él y su hermano Francisco nunca permitieron que eso frenara su progreso. "Practicábamos por turnos, aprendiendo tanto de nuestras experiencias como de nuestros errores", compartió, resaltando la importancia de la colaboración y el aprendizaje conjunto con su hermano.