Este jueves, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró al virus mpox, conocido como viruela del mono, como un evento de salud pública internacional. En ese contexto, autoridades sanitarias y equipos técnicos de todo el país mantuvieron un encuentro del que participaron autoridades mendocinas.
En el encuentro, se decidió reforzar las medidas de prevención y los controles en todos los puntos fronterizos para identificar rápidamente casos sospechosos y evitar su propagación.
Según el Boletín Epidemiológico Nacional emitido el 12 de agosto pasado, en nuestro país se registraron 5 casos confirmados del virus mpox, de 39 notificados como sospechosos.
Hasta el momento no hay fallecidos en la Argentina.
Andrea Falaschi, la directora de Epidemiología y Gestión Integral de la Calidad en Salud de Mendoza, explicó: “La OMS ha dado un alerta con respecto a esta enfermedad, que es producida por un virus, llamada viruela símica, que se transmite de persona a persona a través del contacto con secreciones infectadas por este virus y produce lesiones planas, luego vesiculares en la piel que posteriormente, se umbilican y dan costras, dando distintos estadíos de las vesículas, parecido a la varicela pero son lesiones más grandes y umbilicadas".
Falaschi explicó que preocupación actual a nivel internacional es porque apareció otro clado en 2024, que está circulando en África, que tiene un grupo etario y una afectación más amplia, ya que también han aparecido casos en niños.
Asimismo, Falaschi subrayó que “si bien no ha habido reportes de este clado en otras regiones, hay que alertar y hacer una vigilancia epidemiológica".
Se considera sospechoso un caso cuando una persona haya tenido contacto con un caso de viruela símica entre 5 y 21 días antes que le aparezcan las lesiones, tener fiebre dolores de cabeza y con lesiones umbilicadas o vesiculares, que pueden estar distribuidas en extrmidades, tronco, manos y genitales.
Ante estos síntomas, se debe consultar al centro asistencial, donde se le toma una muestra por PCR para confirmar la enfermedad.
En este sentido, Falaschi explicó: “No hay un antiviral para esta enfermedad, por lo que el tratamiento es de apoyo, manteniendo el aislamiento del paciente porque las secreciones son infectantes y hay que esperar a que caiga la costra de las heridas”.
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